Hoy en día, todos los pasajeros de un coche están protegidos por completos sistemas de seguridad. Sólo uno no lo está: el feto. Para obtener información sobre a qué se exponen una futura madre y su bebé nonato en caso de accidente, Volvo Cars ha desarrollado el primer modelo informático oficial de un maniquí "embarazado".
"Ahora podemos abarcar todo el ciclo vital", afirma Camilla Palmertz, biomecánica del centro de seguridad de Volvo Cars. "Una gran ventaja de este modelo es que podemos escalar a la madre y al bebé al tamaño exacto que queremos estudiar". El maniquí virtual es una mujer muy embarazada, porque es la fase en la que el feto corre más riesgo en caso de accidente. Con las pruebas que se están realizando ahora, Volvo quiere determinar qué influencia tienen el cinturón de seguridad y el airbag sobre la futura madre y su bebé nonato en accidentes simulados. El modelo informático permite estudiar con gran detalle los movimientos del cinturón de seguridad y las influencias de éste y del airbag en el útero, la placenta y el feto. También es posible observar cómo se mueve el feto en relación con el cuerpo de la madre.
Primer maniquí "embarazado" del mundo | Camilla Palmertz |
Pero el modelo puede hacer mucho más. También podría utilizarse para probar nuevas formas de cinturones de seguridad y otros sistemas de seguridad. "Estoy segura de que el cinturón de tres puntos puede seguir desarrollándose para ofrecer aún más comodidad y protección", afirma Camilla Palmertz. En la actualidad, muchas embarazadas se preguntan si el cinturón de seguridad dañará al feto en caso de accidente. Todos los investigadores coinciden en que es aconsejable llevar puesto el cinturón de seguridad en todo momento.
"Pero es importante que se ponga correctamente. Debe pasar entre los pechos y descansar lo más bajo posible sobre las caderas. El cinturón subabdominal no debe deslizarse sobre el vientre de la mujer", explica Camilla Palmertz. "Eso podría dañar al bebé". En caso de accidente, el pecho y la pelvis de la embarazada quedarán retenidos por el cinturón, pero su abdomen se moverá en la dirección dictada por las fuerzas creadas en el accidente. Como el feto flota libremente en el abdomen, hay dos tipos principales de lesiones. La más frecuente es el desprendimiento parcial o total de la placenta, lo que significa que el bebé deja de recibir suficiente oxígeno. En casos menos frecuentes, la cabeza del bebé se lesiona al chocar contra uno de los huesos de la pelvis de la madre. "Creemos que la placenta se desprende porque, a diferencia del útero, relativamente elástico y deformable, no es tan flexible cuando se acelera", explica Camilla Palmertz.
A lo largo de los años, investigadores y fabricantes de vehículos han recopilado muchos conocimientos sobre la mejor manera de proteger a adultos y niños de los efectos de un accidente de coche. Pero se ha investigado poco sobre los bebés no nacidos en accidentes de tráfico. En un estudio de la Universidad sueca de Halmstad, las mujeres encuestadas afirmaron llevar siempre puesto el cinturón de seguridad antes del embarazo. Durante el embarazo, el 7% se abstuvo de hacerlo. Las razones: El cinturón roza, es difícil ponérselo y las futuras madres temían hacer daño al bebé. Casi la mitad de las mujeres tenían el problema de que el cinturón se deslizaba por la barriga en lugar de asentarse sobre las caderas. En un estudio similar realizado en EE.UU., incluso la mayoría de las mujeres habían declarado que llevar el cinturón de seguridad era incómodo, que les rozaba y que se deslizaba por el vientre. En este caso, la proporción de mujeres que no utilizan el cinturón debido a las restricciones de comodidad alcanzaba el 13%.
"Por eso es tan importante este maniquí para embarazadas", afirma Camilla Palmertz. "Necesitamos más información para poder desarrollar la protección óptima para la futura madre y el feto. Una cosa que ahora sabemos con certeza es que las embarazadas deben llevar siempre puesto el cinturón de seguridad y asegurarse de que el cinturón subabdominal pasa por debajo del vientre."